
Hace unos meses
Sony nos bombardeaba con la campaña publicitaria de
Heavy Rain, una aventura gráfica para
PlayStation 3 bastante oscura que desarrollaba en su argumento la carrera contra reloj para detener al
Asesino del Origami, un retorcido
serial killer que acaba de secuestrar a su nueva víctima. Y es que siempre actúa de la misma manera: se hace con un
niño de 10 años a plena luz y sin testigos para luego ahogarlo cuatro días después dejando en el cuerpo una
figurita de origami y una orquídea.
Bueno, pues esta premisa un tanto trillada pero tan cinematográfica va a convertirse, de hecho, en película de la mano de los productores
Bob Shaye (ex-CEO de
New Line) y
Michael Lynnes (
Unique Features).
Lo curioso del caso es que el videojuego, aunque
no ha funcionado muy bien en lo que a ventas se refiere,
gustó tanto a Shaye que decidió pagar la licencia de su propio bolsillo antes de esperar al visto bueno de
Warner Bros. con los que mantiene un contrato de
first look.
Si se lo montan bien, quizás tengamos una nueva
Se7en en ciernes …