No hay rosa sin espina

Los tiempos cambian que es una barbaridad y los rusos ya no son aquellos temibles enemigos del “mundo libre y democrático” que eran. Sin duda todo un problema para los guionista de Casino Royale, la próxima película protagonizada por James Bond y basada en el libro homónimo escrito por su creador, el inglés Ian Femming en los años 50. En el texto, el villano principal es un agente ruso conocido como Le Chiffre. Como no parece demasiado creíble, han decidido ajustarlo a los arquetipos actuales de malvado y tachaaaan, se ha convertido en …. un fundamentalista islámico millonario que provee de fondos a organizaciones terroristas internacionales (¿lo llamarán Le Osama?). De hecho, los rumores apuntan a que en próximas historias de la franquicia, el espía británico se las tendrá que ver con una nueva red de criminales en la sombra. Vamos, una especie de Espectra pero adaptada a los tiempos que corren. ¡Que Alá nos pille confesados!