Se acerca El reino de los cielos
No, no, tranquilos porque ni se acaba el mundo, ni el papa Benedicto XVI ha invocado el Apocalipsis, cabreado por el matrimonio entre homosexuales.
Con este nombre se presenta la última película dirigida por el británico Ridley Scott, que últimamente parece especializarse en la realización de epopeyas heróicas con cientos de extras. Escrita por William Monahan, está ambientada en las cruzadas y promete unas escenas y fotografía espectaculares.
No es la primera vez que se intenta plasmar este convulso período medieval en los últimos años. Ya a principios de los 90, Paul Verhoeven y Arnold Schwarzenegger estuvieron inmersos en un proyecto que fracasó por falta de financiación.
Sin embargo, hoy día parece ser un momento más adecuado si atendemos a los resultados en taquilla de películas de ambientación histórica como Troya o Gladiator.
En la película, seguiremos la trayectoria de Balian, un joven herrero francés del siglo XII, hijo bastardo del caballero Godofredo de Ibelin. Tras perder a su mujer y su hijo, decidirá acompañarle a Jerusalén y hará suyo el compromiso de su padre de velar por la paz y seguridad de Tierra Santa.
Encabezando el reparto tenemos a Orlando Bloom, en lo que parece ser la consolidación de su carrera tras Piratas del Caribe y el papel de Legolas en la trilogía de El señor de los anillos de Peter Jackson. Está acompañado por otros actores de peso como Liam Neeson, Jeremy Irons, David Thewlis, Brendan Gleeson o Edward Norton. Mención especial para este último, que ha tenido que ocultar su rostro tras una máscara para interpretar a su personaje, el leproso rey Balduíno.
La producción comenzó en enero del 2004 en Marruecos, con un presupuesto de 110 millones de dólares. Posteriormente el equipo se trasladó a España en donde se rodaron escenas en localizaciones de Huesca, Avila o Segovia.
Con este nombre se presenta la última película dirigida por el británico Ridley Scott, que últimamente parece especializarse en la realización de epopeyas heróicas con cientos de extras. Escrita por William Monahan, está ambientada en las cruzadas y promete unas escenas y fotografía espectaculares.
No es la primera vez que se intenta plasmar este convulso período medieval en los últimos años. Ya a principios de los 90, Paul Verhoeven y Arnold Schwarzenegger estuvieron inmersos en un proyecto que fracasó por falta de financiación.
Sin embargo, hoy día parece ser un momento más adecuado si atendemos a los resultados en taquilla de películas de ambientación histórica como Troya o Gladiator.
En la película, seguiremos la trayectoria de Balian, un joven herrero francés del siglo XII, hijo bastardo del caballero Godofredo de Ibelin. Tras perder a su mujer y su hijo, decidirá acompañarle a Jerusalén y hará suyo el compromiso de su padre de velar por la paz y seguridad de Tierra Santa.
Encabezando el reparto tenemos a Orlando Bloom, en lo que parece ser la consolidación de su carrera tras Piratas del Caribe y el papel de Legolas en la trilogía de El señor de los anillos de Peter Jackson. Está acompañado por otros actores de peso como Liam Neeson, Jeremy Irons, David Thewlis, Brendan Gleeson o Edward Norton. Mención especial para este último, que ha tenido que ocultar su rostro tras una máscara para interpretar a su personaje, el leproso rey Balduíno.
La producción comenzó en enero del 2004 en Marruecos, con un presupuesto de 110 millones de dólares. Posteriormente el equipo se trasladó a España en donde se rodaron escenas en localizaciones de Huesca, Avila o Segovia.